¿Sanders presidente?

Las propuestas de Bernie Sanders (salud universal gratuita, educación superior universal gratuita, aumento de la presión fiscal sobres los ricos, etc) no son para nada descabelladas toda vez que en Europa se aplican y funcionan muy bien y es lo que conocemos como Estados de Bienestar.

Pero hay dos cuestiones a considerar antes de su implementación.

La primera es saber si la ciudadanía estadounidense es capaz de llevar a cabo un proyecto político y económico como éste. Si no lo fuera les esperará un "hermoso y brillante Populismo" al fiel estilo latinoamericano.

Es necesario una cultura política ciudadana adecuada para que las políticas redistributivas, intervencioniatas y dirigistas no terminen en corrupción generalizada e ineficiencias calamitosas en cada rincón del Estado se observe.

Nosotros, los latinoamericanos,  conocemos perfectamente bien lo que sucede cuando la ciudadanía no es capaz de controlar como corresponde a sus dirigentes y tampoco de votar con la absoluta responsabilidad que se requiere cuando se utilizan estas políticas.

Y la segunda, más importante aún, es que China probablemente lo "comerá vivo"en la guerra fría que los enfrenta -ver "La Nueva Guerra Fría. Desarrollo vs Subdesarrollo. Occidente vs Oriente. Posmodernidad vs Medievo"-.

Contienda donde el arsenal armamentista se basa en la generación de las nuevas y más eficaces armas de dominación y conquista de los últimos 50-60 años, me refiero a las corporaciones multinacionales.

Una política dirigista y distribucionista que conlleva enormes presiones fiscales  e intromisión del Estado en las decisiones económicas, sin dudas dificulta muchísimo la aparición de nuevos emprendedores, así como la audacia necesaria para aventurarse  en la destrucción creativa y la innovación al desincentivar al encargado de impulsar todos estos fenómenos económicos claves para la generación de riquezas y poder mediante corporaciones multinacionales más fuertes y competitivas, me refiero a la ambición y a la codicia.
Cuanto más presión impositiva, menores ganancias habrá y por tanto, menores incentivos a arriesgar en los ambiciosos tendrán.
Para éstas políticas se requiere de la cultura estructurada y eficiente al extremo de los alemanes para mantener un arsenal de industrias capaces de dominar los escenarios claves de la economía y con ello el poder de influencia donde se necesite en la magnitud necesaria para al menos proteger tus territorios en esta guerra donde está en juego el futuro de la Democracia global.
Si así no fuera, en esta contienda, solamente quedará esperar a que los enemigos, los primitivos regímenes dictatoriales, caigan por su propio peso. Algo por suerte no muy difícil de producirse dada la enorme osadía del sistema chino, el líder de este bando, que considera a la economía como algo totalmente sujeto a las decisiones políticas. Como la de emitir tanto dinero y deuda como se les de la gana para estimular a los ambiciosos y emprendedores generadores de "armamentos" sin esperar a que aparezcan consecuencias negativas a pagar.
Hasta ahora le está saliendo bastante bien, pero en toda la historia nadie ha logrado salir airoso ante semejante objetivo salvo en los breves periodos de guerra.
Veremos.