Codicia


Un impulso proveniente de algún primitivo rincón de nuestro cerebro que nos hace creer que destacar nuestro ego ante los demás es una necesidad irrevocable hace uso a menudo de una herramienta que conocemos con el nombre de Codicia para sentirse satisfecho.
Finalmente, resulta que la persistente actividad de la Codicia detrás de ese objetivo pulsional termina construyendo nuestro sistema de vida.
Nada más y nada menos que esa estructura que engloba todo lo que hacemos o no hacemos, deseamos, queremos, destruimos o construimos.
Si presta un poco de atención, descubrirá que finalmente todo lo que odiamos es producto de la Codicia. Desigualdades, injusticias sociales, inseguridad ante la sensación de desprecio de los desprotegidos del sistema, guerras, dictaduras feroces cuya única motivación es satisfacer los caprichos de la codicia de los líderes, calentamiento global consecuente de la interminable búsqueda de ganancias para finalmente obtener ganancias que nadie sabe para que las quiere y podría seguir hasta rellenar decenas de páginas describiendo cosas que odiamos por efecto de la Codicia.
Pero, sin embargo, resulta que todo lo que disfrutamos, amamos y deseamos también lo tenemos gracias a la Codicia. Tecnologías que facilitan nuestras vidas proveídas por el sistema llamado capitalismo que no es otra cosa que la estructura donde la Codicia se desenvuelve y donde más cómoda se siente, generación de trabajo en abundancia, más abundancia cuanto más fácil le resulta a la Codicia desenvolverse, medicinas y técnicas que nos permiten vivir casi un siglo, capitales que hace posible una vida de retiro cuando nos sentimos cansados, más un enorme etcétera de beneficios que también podrían llenar decenas de páginas describirlas.
Finalmente, se podría afirmar que dado que es la codicia la que nos conduce y determina todo lo malo como también todo lo bueno que nos toca vivir, ya es hora que se le de el lugar que corresponde en la literatura política para que así algún día logremos que la Codicia se encargue de darnos todo lo bueno que es capaz de dar pero también evitar todo lo malo que es capaz de provocar.
Comparto este vídeo que resulta muy instructivo para conocer en profundidad una de las cuestiones centrales de este blog, a la Codicia.

Comentarios

Posts más vistos

Instituto Patria, un psiquiátrico. Y sin psiquiatras.

Pfizer, muerte e ideología.

Borges, la crisis Argentina y lo que nadie dice.

Cristina, el gran problema argentino

El comunismo y su enemigo imbatible

El pueblo y la envidia

Cultura colectivista vs cultura individualista

Instinto y cultura nuestros verdaderos soberanos

Cuanto peor, mejor

La Nueva Guerra Fria. Desarrollo vs subdesarrollo. Occidente vs Oriente. Posmodernidad vs Medioevo